Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de abril, 2020

¡Qué cara más bonita!

Siguiendo con las rutinas de relajar a nuestros hijos e hijas a través del masaje, casi siempre pensamos en masajes en la espalda, abdomen, piernas, pies..., pero pocas veces pensamos que un masaje en la cara puede ser muy positivo para alcanzar nuestro objetivo de relajación. Por esta razón vamos a centrarnos en el masaje relajante de cara. La cara suele ser un centro de cúmulo de tensiones y emociones, por eso el masaje en esta zona va a conseguir un efecto muy positivo en la liberación de todo este tipo de sentimientos que se quedan fijados en la musculatura y en nuestros gestos. Abrir un libro sobre la frente. Esta maniobra la podemos hacer con todos los dedos juntos, pero es más fácil llevarlo a cabo con los pulgares. Realizaremos un suave estiramiento de la piel de la frente desde el centro hacia los lados. Deslizamiento sobre cejas. Con nuestros pulgares haremos una maniobra como la anterior, pero sobre las cejas. Deslizamiento por los lados de la nari

Me duele la tripa

Siguiendo con la relajación de nuestros hijos e hijas, hoy toca abordar el abdomen. Las técnicas de masoterapia, aplicadas correctamente sobre esta parte del cuerpo pueden ser muy beneficiosas a la hora de aliviar cuadros de gases o estreñimiento. Manos que reposan. Colocamos las manos apoyadas sobre el abdomen de nuestro hijo. Esta maniobra sirve para tomar contacto. Noria.  Colocamos ambas manos planas, una tras otra, y las deslizamos de arriba hacia abajo como si se tratasen de las aspas de un molino o una noria. Noria con piernas flexionadas. Colocamos las piernas de nuestro hijo o hija flexionadas (cadera a 90 grados) ayudándonos con una mano, si son pequeños, o con un brazo y el hombro si son más mayores. La otra mano realiza el movimiento de la maniobra anterior. Deslizar pulgares hacia los lados. Con los pulgares colocados a ambos lados del ombligo, los deslizamos hacia afuera como si quisiésemos estirar la piel del abdomen. Maniobra del reloj. La m

Sintiendo nuestros pies y piernas

Como ya dijimos en el post de  "Un poco de relajación" , vamos a ir desglosando como practicar esa relajación con nuestros hijos e hijas, ya que les vamos a ofrecer un arsenal de recursos beneficiosos para su organismo. Hoy nos vamos a centrar en las piernas y los pies. Antes de nada hay que saber que si el niño tiene fiebre está contraindicado cualquier tipo de masaje. También tenéis que recordar que hay que retirar anillos o pulseras que puedan molestar durante la aplicación de la técnica. En primer lugar vamos a ponernos el aceite en las manos, nunca directamente sobre la piel del niño, y lo frotamos para calentarlo y extenderlo en ambas palmas. Cada maniobra se puede realizar más de una vez, pero siempre a ritmo lento y pausado, sin ejercer presión excesiva. Colocamos al niño tumbado boca arriba. Técnica de vaciado descendente: pasamos las manos alternativamente abrazando la pierna desde la cadera hasta el tobillo.  Maniobra de torsión: las dos manos,

Un poco de relajación

Una de las partes de la fisioterapia por la cual más se conoce nuestra profesión es el masaje. El masaje es una técnica que se ha utilizado desde que el hombre es hombre, desde cuando los hombres primitivos se frotaban la zona que previamente se habían golpeado para mitigar su dolor, hasta hoy en día donde tenemos multitud de variantes y técnicas. Está claro que para dar un masaje, por muy inofensivo que pueda parecer, se debe realizar por una persona formada en la técnica para evitar posibles lesiones en los tejidos. Pero si es cierto que se pueden realizar algunas maniobras de masoterapia con nuestros hijos para ayudar, por ejemplo, a relajarse y liberar estrés, ya que esta enfermedad moderna lo sufren tanto los adultos como los más pequeños. Además de conseguir la relajación, el masaje tiene multitud de beneficios: Incremente el apego y lazos entre el niño y la persona que realiza la técnica. Ayuda a la respiración profunda ya que influye en el sistema nervioso autón

Taller sensitivo

Hoy vamos a profundizar en una actividad tan importante como puede ser el trabajo a nivel motor con los niños. En la mayoría de las ocasiones las familias sólo se centran en el trabajo en la esfera motora de los niños. Si el niño es capaz de gatear, de andar, de voltear, de saltar a la comba, de escribir con una caligrafía bonita, tocar un instrumento, etc. Pero hay una esfera, que casi siempre se pasa por alto, que es la parte sensitiva. Cuando hablamos de sensibilidad tenemos que saber que existen varios tipos.  Sensibilidad profunda o propioceptiva : que, entre otras cosas, nos proporciona información sobre la posición de nuestras articulaciones. Sensibilidad superficial o exteroceptiva: es la que nos proporciona información del exterior de nuestro cuerpo, como por ejemplo información táctil, térmica o dolorosa superficial. Sensibilidad cortical o mixta: es una combinación de las dos anteriores y nos da información precisa sobre formas de objetos (esterognosia), pes

¡Siéntate bien!

¡Qué importante es sentarse bien!, pero hay muchos de vosotros que os preguntaréis cómo debe estar alguien sentado, para estar sentado bien. Uno de los aspectos que primero trabajamos en fisioterapia escolar es el pupitre y silla de aquellos niños que tiene necesidades educativas especiales. Pero es cierto que cuando terminamos de adaptar el puesto escolar de estos niños, nos damos cuenta que el resto de niños de clase no están bien sentados, pero la gran mayoría es porque no pueden. Y no pueden porque las mesas son  muy altas o muy bajas, la silla demasiado grande... Como siempre hemos dicho, hay que dar las herramientas necesarias a los niños para que ellos puedan desarrollar todas sus potencialidades, y eso pasa por adaptarles los puestos escolares en los colegios, pero también su zona de estudio o mesa donde comen en casa. No les podemos pedir que apoyen la espalda en el respaldo, si no llegan a él. Por eso vamos a plantear una serie de adaptaciones de "bajo coste

Mamá me duele la espalda

Afortunadamente los niños son menos propensos a sufrir dolores de espalda, si lo comparamos en relación a los adultos. Pero esto no significa que queden libres de sufrirlos. Hay muchos factores que influyen en que aparezca dolor de espalda en niños y niñas. Por un lado tenemos los malos hábitos posturales, tanto en el colegio mientras están en clase como cuando se tiran en el sofá a ver la tele. Las dichosas mochilas también son un factor muy importante a tener en cuenta, bien sea porque el peso es excesivo, el tamaño inadecuado, la forma de llevarla es errónea... Pero en muchas ocasiones el desacondicionamiento físico de los músculos de la zona abdominal, de la espalda, de la zona glútea, unido a la falta de elasticidad que ya presentan a corta edad, favorece la aparición y la perpetuación de dolencias musculoesqueléticas. Por eso en este post vamos a proponer una pequeña tabla con ejercicios y estiramientos para que los más pequeños (y los más mayores) puedan implementar

Un poco de coordinación

Uno de los aspectos que se trabajan en las sesiones clínicas de fisioterapia con niños que tienen necesidades especiales es la coordinación . Como en el post sobre el equilibrio, tenemos que ampliar lo que entendemos como coordinación. Generalmente pensamos que la coordinación hace referencia a coger las cosas que nos tiran o hacer malabares. Por eso vamos a proponer una serie de actividades que se pueden hacer y plantear a los más pequeños para trabajar los distintos aspectos de la coordinación: Coordinación entre grupos musculares . Es un tipo de coordinación que se da por hecha, ya que se controla involuntariamente por nuestro sistema nervioso, es decir, nosotros no lo hacemos conscientemente. Para que lo entendáis es cuando la musculatura flexora de nuestro brazo (bíceps, braquial, etc.) deja que la musculatura extensora de ese brazo (tríceps) haga su función para alcanzar un objeto. Si pensamos en el ejemplo anterior el bíceps se tendrá que relajar para permitir que e

Quiero que mi hijo...

Desde mi experiencia profesional siempre que he tenido encuentros con padres y madres de niños a los cuales estoy tratando, y les he preguntado como ven ellos a sus hijos e hijas y los avances que han ido experimentando durante las diversas terapias que reciben (normalmente excesivas en número), siempre oigo lo mismo: "quiero que mi hijo...". Ante la situación que tienen muchos padres y muchas madres de encontrarse con un hijo o hija que tiene dificultades motóricas, sociales, psicológicas, psiquiátricas o de cualquier índole, se podría llegar a pensar que lo que quieren esos padres es que su hijo o hija haga las mismas actividades que hacen el resto de niños de su mismo rango de edad. Lo cual es verdad y debe ser así. Pero de lo que muchas veces no se es consciente, es que podrán hacer y participar de las actividades que hacen sus hermanos, amigos y compañeros de colegio, pero con "ayudas o adaptaciones" que potencien lo que él o ella puede hacer. Como pro