Ir al contenido principal

¡Ya podemos salir con los niños!

Después de mucho tiempo en casa a causa del confinamiento nos ha llegado la hora de poder salir con nuestros hijos para que les de el sol, respiren un poco de aire y, sobre todo, para que hagan un poco de deporte y así eviten el desacondicionamiento físico que estamos padeciendo todos. Incluso nuestros hijos lo sufren y seguramente os habréis dado cuenta que se cansan más que antes del encierro.
Si a todo esto le añadimos que algunos niños y niñas presentan algún tipo de necesidad especial, bien por distintas capacidades motoras, cognitivas o ambas, está claro que el problema del desacondicionamiento es aún mayor y más preocupante para los padres y madres.
Por eso muchos de nosotros hemos salido intentando aprovechar al máximo la hora, que estén activos con bicicletas, patinetes, patines, corriendo, etc. Pero hay que tener en cuenta que la vuelta a la actividad física debe ser paulatina para evitar la aparición de fatiga, dolencias musculares (agujetas), que lo vean como una obligación, en vez de como algo lúdico y de esparcimiento y demás inconvenientes.
Por eso es importante que se empiece por una actividad suave, como caminar o montar en patinete. También es importante pautar pequeños descansos si el niño lo necesita o incluso volver antes a casa si vemos que es necesario. Una vez que el niño se haya acostumbrado al ritmo de salidas es importante que en ese tiempo para ellos hagan actividades que les gusten y les haga disfrutar de la actividad física.
Entonces ¿qué se puede proponer?

Pasear. Es ideal como actividad física inicial y siempre que les guste. Para aquellos que utilicen algún tipo de dispositivo para desplazamiento, como un andador, es bueno que empiecen a realizar pequeños desplazamientos y que se les pauten descansos ya que su marcha requiere mucho mayor gasto energético.
Para aquellos niños que vayan en silla de ruedas y puedan autopropulsarla hay que fomentar que así lo hagan, inicialmente por terreno llano, incluyendo giros y cambios de dirección y posteriormente aumentar la dificultad con pequeños desniveles.

Patinetes. Es una actividad que para iniciar, también es buena, ya que no implica mucho esfuerzo físico (siempre que se vaya en llano). Al existir diferentes modalidades de patinetes que van desde más estables (tres ruedas) hasta menos estables (dos ruedas), pueden ser usados por casi todos los niños que consiguen una bipedestación estable. Incluso aquellos niños que no tienen toda la estabilidad pueden ser ayudados por sus padres para que puedan beneficiarse de este juguete que trabaja la estabilidad y el equilibrio.

Bicicletas. Al igual que los patinetes pueden ser usadas por los niños con mayor estabilidad y por los que no saben montar (añadiendo los ruedines).

Balones y pelotas. A pesar de no poder relacionarse con otros niños, con los balones y pelotas se pueden hacer muchos juegos, desde jugar a pasarse el balón con manos y con pies, meter gol entre dos marcas, jugar al voley, jugar al tenis o al pádel, etc.

Escondite. Se puede jugar tanto a la versión original donde uno cuenta y los demás se esconden o también al escondite inglés. Éste último se puede complicar un poco si ponemos la regla de que cuando estamos quietos sólo podemos apoyarnos en un pie.

Rayuela. Es un juego perfecto y muy divertido. Consiste en dibujar 10 casillas que hay que ir saltando de distinta manera en función de donde caiga la piedra que has tirado inicialmente. Aquí os dejo el video.

Saltar a la comba. Otro de los juegos tradicionales y es perfecto para estos días. Se puede perfeccionar la técnica y saltar no sólo hacia delante, sino también hacia detrás, con un solo pie, los dos juntos, etc.

Como veis hay multitud de cosas que los niños pueden hacer sin acercarse a los parques y demás mobiliario urbano.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Pilates para los niños.

Hoy vamos a hablar de una disciplina, relativamente moderna, como es el Pilates. Este tipo de ejercicios, donde prima el control postural y el fortalecimiento de la musculatura abdominal y del raquis es muy practicado por la población adulta, pero también tiene unas ventajas extraordinarias para la población infantil y adolescente. Además como existen múltiples variables para cada ejercicio, puede ser practicado por niños que tiene diversidad funcional o presentan algún tipo de dolencia. Puente (the bridge). Es un ejercicio muy sencillo donde fortalecemos principalmente la cadena posterior de nuestro cuerpo (musculatura del raquis, glúteos, musculatura posterior de las piernas). Para aquellos niños con diversidad funcional podemos colocar nuestras manos debajo de sus glúteos y asistir el movimiento hacia arriba, al mismo tiempo que los "estrujamos suavemente". Roll up. Es un ejercicio donde fortalecemos la musculatura abdominal pero también la estabilizadora d

Diversión en el agua. Otra forma de trabajo

Ahora que tenemos la perspectiva del verano y poder acudir a las piscinas, debemos aprovechar este excepcional recurso con nuestros hijos, ya que nos permite de una forma atractiva y lúdica para ellos trabajar muchos aspectos que fuera del agua nos puede resultar muy complicados.  Hoy vamos a iniciarnos en una maravillosa técnica, con amplia evidencia científica en sus resultados, que es el método de Halliwick. Es uno de los programas más usados en pacientes infantiles y adultos, con compromisos neuromusculoesqueléticos como la parálisis cerebral, espina bífida, síndrome de Rett, autistas, síndrome de Down, entre otros.  A modo de resumen el Método Halliwick se desarrolló en los años 50 para enseñar a nadar a pacientes con alguna discapacidad física, con la finalidad de dotar de independencia a estas personas en sus actividades de la vida diaria.  Este método se basa en 10 objetivos o puntos de aprendizaje motor que el paciente debe lograr superar uno a uno para conseguir de forma grad

Soy un gatito.

La cuadrupedia y el gateo es una de los primeros medios de locomoción que adquiere un niño y les abre todo un mundo a su alrededor para explorar. A medida que van perfeccionando el gateo pasan de hacerlo de forma descoordinada o coordinadamente. La cuadrupedia es una posición mucho más estable que la bipedestación ya que tenemos más puntos de apoyo (4 en lugar de 2) y mayor base de sustentación que cuando estamos de pie. Esto hace que muchos niños que están aprendiendo a andar decidan ir gateando hasta donde quieren llegar y luego allí se ponen de pie para seguir su exploración. Esto se debe a que les proporciona mayor seguridad gatear que andar en sus primeras etapas. El gateo es además un excelente ejercicio que desarrollar, aún cuando ya los niños y niñas son mayores ya que tiene múltiples beneficios: Multiplica la  capacidad de exploración y descubrimiento  del entorno. Sobre todo para aquellos niños que no pueden caminar de manera autónoma. Gatear implican un  ejercicio muy intens